El agua es uno de los recursos básicos y esenciales para la vida, así como para el mantenimiento de los ecosistemas del planeta, y también es un componente estratégico de nuestra economía.
De acuerdo con los datos que maneja el Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico, la demanda estimada de agua en España para el año 2021 fue del orden de los 32.000 hm3/año. El principal uso del agua es el regadío y usos agrarios, lo que supone aproximadamente el 80,5% de esta demanda, seguido por el abastecimiento urbano que representa el 15,5%. Tras ello, estaría el uso industrial.
En plena sociedad del conocimiento no se dispone de información completa sobre el uso del agua, así como de las pérdidas de esta que se producen en las redes de distribución por fugas, roturas o filtraciones.
En este contexto, consciente de la importancia estratégica del agua y ante la necesidad de reforzar la respuesta ante los efectos adversos del cambio climático, el Gobierno de España presenta el Proyecto Estratégico para la Recuperación y la Transformación Económica (PERTE) Digitalización del Riego que aborda la necesidad de emprender una completa modernización del ciclo del agua en el país con el fin de avanzar hacia una gestión más eficiente y sostenible de la misma. A tal fin, este PERTE incluye un conjunto de medidas transformadoras y facilitadoras que optimizan el potencial económico del sector y ponen fin a las ineficiencias detectadas en el sistema. Se eliminarán muchas de ellas a través de la digitalización del riego.
El sector agrícola vive una situación de riesgo debido a la situación de sequía que vivimos tras una mitad de 2023 en la que los niveles de precipitaciones han sido un 75% menores que la media de los últimos diez años en este mismo periodo de tiempo. Las consecuencias de esta crisis hídrica para el sector agrícola nos afectan directa e indirectamente a todos. Debemos actuar.
No podemos controlar cuándo llueve, pero sí podemos dar un paso adelante para eficientar y mejorar la gestión de los recursos hídricos que necesita el sector a través de la digitalización del riego. Porque de ello dependerá la disponibilidad de alimentos para la población. Un reto que debemos afrontar y ante el que se nos brinda una oportunidad excepcional para hacerle frente con la convocatoria de ayudas del PERTE de Digitalización del Ciclo del Agua para regadío.
Lograr la digitalización del riego es esencial. Desde Elliot Cloud apostamos por contribuir en la lucha actual contra la sequía y el cambio climático mediante la propuesta de soluciones tecnológicas que ayuden al sector agrícola a lograr los retos presentes y futuros en la gestión eficiente de los recursos hídricos. La tecnología es una potente herramienta a nuestra disposición que debemos usar para eficientar el uso del agua.
Con Elliot Water no solo cubrimos las siete soluciones digitales subvencionables si no que aportamos el valor añadido del tratamiento de los datos mediante analítica avanzada e inteligencia artificial para construir soluciones robustas, escalables y seguras sin perder el foco de una Digitalización con Sentido.