La Red Española de Ciudades Inteligentes (RECI) está compuesta actualmente por 93 ciudades miembros, 44 municipios amigos y otras dos entidades asociadas Red.es y el Colegio de Ingenieros de Telecomunicación. Todas ellas componen un ecosistema que contribuye a promover la gestión automática y eficiente de las infraestructuras y los servicios urbanos, así como la reducción de gasto público y la mejora de la calidad de los servicios, con los que conseguir el progreso de las ciudades.
Francisco Javier Ridruejo Pérez es el secretario de la RECI y, actualmente, es coordinador general de Promoción Económica, Modernización Tecnológica y Conocimientos Profesionales en el Ayuntamiento de Logroño. Ridruejo habla de cómo la aplicación de la tecnología favorece la mejora en la gestión del ciclo integral del agua urbana y contribuye a seguir avanzando en los objetivos de sostenibilidad, conservación de los recursos hídricos y bienestar ciudadano.
Además, explica cómo los espacios de datos compartidos y los gemelos digitales pueden convertirse en herramientas relevantes para la gestión de activos en las ciudades y, en concreto, en el sector del agua.
ENTREVISTA
¿Cómo valora el potencial de España para acelerar el proceso de transformación digital en el sector del agua?
España es uno de los países más avanzados del mundo en la gestión de infraestructuras hídricas, por ejemplo, en riego, desalación, trasvases entre cuencas hidrográficas, embalses y gestión del agua urbana en municipios que multiplican varias veces su tamaño en período estival, sin tener problemas de capacidad y gestionando de manera correcta todo su ciclo de vida: captación, tratamiento, almacenamiento, distribución, saneamiento y regeneración.
Además, las importantes variaciones que empezamos a sufrir derivadas del cambio climático están llevando al país, regiones y a las ciudades a establecer políticas de control y optimización de este recurso, y la modernización de las infraestructuras con programas como el PERTE del Agua promovido por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico con fondos PRTR.
España ha exportado su modelo de éxito de gestión de infraestructuras, incluyendo las del agua a otros países y tenemos en el país a grandes operadores mundiales del sector con tecnología propia y una gran experiencia en el sector.
La Red Española de Ciudades Inteligentes (RECI) es un impulso para acelerar este proceso de transformación. ¿Considera la colaboración público-privada un factor fundamental para la buena marcha de los proyectos de digitalización de los recursos hídricos?
Desde luego, la colaboración público-privada es siempre deseable, ya que los técnicos municipales difícilmente pueden estar al día de todas las tecnologías, herramientas o buenas prácticas existentes en el sector privado que tiene ritmos muy diferentes en el desarrollo de sus soluciones. Por otra parte, siempre es interesante conocer las tendencias y los procesos de optimización llevados a cabo por otras administraciones apoyadas por empresas especialistas en el sector hídrico.
Podríamos decir que los datos y la información son las claves del éxito para mejorar la toma de decisiones. ¿Cómo se ve desde la RECI la propiedad de esos datos y la transparencia e interoperabilidad de las herramientas empleadas en este proceso de transformación?
Estamos en la economía de los datos. Todo aquello que no medimos no puede mejorar, por lo que necesitamos primero poder recoger los datos, depurarlos, almacenarlos, interpretarlos y transformarlos en conocimiento para poder tomar decisiones acertadas basadas en datos y no en impresiones. Además, teniendo en cuenta este tipo de infraestructuras y la cantidad de datos que pueden generar en tiempo real en un municipio de tamaño medio, es importante contar con plataformas de explotación de datos basadas en tecnologías no-SQL o en distribuciones big data como Cloudera, Graphenus y otras que pueden ayudar mucho en el tratamiento de datos.
Por otra parte, cada vez es más necesario que estos datos sean interoperables con las plataformas de Smart Cities, como Fiware, Elliot Cloud, Onesait o Telefónica, ya que estas plataformas permiten correlacionar los datos recogidos con otros verticales de ciudad como el energético, el medioambiental o el de riego que tanta relación tiene con el hídrico, evitando picos de potencia instalada, ahorrando agua y optimizando el uso de recursos a los municipios.
“La misión de las ciudades es prestar servicios a sus ciudadanos de la manera más eficiente y transparente posible”
En este sentido, ¿cómo ve la Administración la creación de data lake o espacios de datos compartidos para el sector del agua y otros sectores que afectan a la gestión de las ciudades?
Siempre que tengan un uso práctico y un retorno de inversión medible serán bienvenidos. La misión de las ciudades es prestar servicios a sus ciudadanos de la manera más eficiente y transparente posible.
También se pueden hacer pilotos que no tienen que ser rentables en su instalación, pero cuando estos proyectos se implantan en las ciudades a gran escala, el ROI es un parámetro importante a considerar. Por ejemplo, no tiene sentido instalar una amplia red de contadores inteligentes con un sistema de comunicaciones de última generación para medir los consumos en tiempo real y que el coste de operación del sistema sea muy superior al de mandar a operarios en coche a revisar contador por contador.
Sabemos que la tecnología está preparada para la creación de esos espacios de datos compartidos y que existen soluciones novedosas en el sector que aportan ventajas frente a las tradicionales. ¿Cree que la Administración Pública y sus técnicos tienen conocimientos de estas soluciones novedosas y del potencial que aportan los espacios de datos compartidos?
Normalmente no. Es decir, hace falta ejercer una labor de concienciación a los técnicos municipales para que conozcan diferentes posibilidades y tomen decisiones para su implantación, siempre teniendo en cuenta la relación coste/beneficio.
En cuanto al potencial de los espacios de datos, todavía estamos empezando a ver sus beneficios y no hay ninguno a gran escala que esté dando los resultados teóricos, por lo que es un trabajo aún en desarrollo. El principal escollo que tenemos que salvar es conseguir que las empresas apuesten por volcar su información en estos espacios de datos y que obtengan información de los mismos para la creación de productos de valor añadido. La aportación de datos de las ciudades a estos espacios de datos no será un problema, pero sí que todas las partes perciban el valor añadido de este tipo de infraestructuras.
“Es necesario que haya una plataforma de ciudad inteligente que permita agregar los distintos servicios, operarlos y que interoperen entre ellos de forma que todo resulte más eficiente”
Se está apostando por los gemelos digitales y el interés por ellos es creciente. ¿Qué son y cómo se usan en la gestión integral del agua urbana?
El gemelo digital es una infraestructura virtual que simula una infraestructura real y su operación, de manera que representa, en una plataforma informática, todo lo que está pasando en una infraestructura real, por ejemplo, hídrica, en todas sus etapas: captación, tratamiento, almacenamiento, distribución, saneamiento y regeneración.
Las plataformas verticales de ciudad inteligente normalmente permiten ver el estado de las infraestructuras y monitorizarlas, establecer indicadores y generar información para la ayuda a la toma de decisiones. Pero un gemelo digital no se queda ahí solamente. Los más avanzados permiten la operación de la infraestructura, incluso ayudado por sistemas inteligentes basados en inteligencia artificial o redes neuronales avanzadas; hacen posible simular operaciones antes de ser realizadas para ver el comportamiento del sistema antes de hacerlas, y así evitar costosos errores y favorecen la monitorización y funcionamiento de manera semi automática en un estado ideal.
Entonces, ¿podríamos decir que los gemelos digitales cambiarán el futuro en la gestión del agua?
Desde luego, los gemelos digitales cambiarán la forma en que operamos nuestras infraestructuras, permitirán simular situaciones imprevistas, e introducirán la inteligencia artificial en los municipios, aligerando la gestión de grandes infraestructuras.
Y, por último, en relación a la gestión inteligente de ciudades, ¿es la RECI partidaria de integrar en plataformas horizontales de ciudad inteligente las diferentes verticales como puede ser la gestión del ciclo integral del agua urbana y los espacios de datos compartidos?
Sí, desde la Red Española de Ciudades Inteligentes (RECI) promovemos el uso de tecnología en la gestión de los municipios, y dada la atomización de la introducción de tecnología en los distintos departamentos municipales, es necesario que haya una plataforma de ciudad inteligente que permita agregar los distintos servicios, que permita operarlos. Además, que interoperen entre ellos y se establezcan sinergias, de manera que todo resulte más eficiente y sencillo de cara a la gestión horizontal de la ciudad.